Yo sólo me pregunto…
¿Por qué ha de ser sólo mía
Esta soledad que carcome
Y devora mis entrañas,
Y este dolor que corroe
Y mi mente con saña empaña?
¿Por qué yo he de ser
El único en esta tierra
Que ha de padecer
Por semejante anomalía
En su alma y en su vida?
¿Llegará acaso el día
En que observar con alegría
Pueda al sol, bajo las nubes
Del imperio del empíreo,
Y no sienta la opresión
Del corazón contra mi pecho;
Día en que el cielo
Me ceda el derecho
Me ceda el derecho
De volar sobre el desprecio
De este mal tan terrenal?
Sólo me pregunto…
¿Cuál puede ser mi carencia?
¿Quién fue el que dictó esta sentencia?
¿Quién fue el que dictó esta sentencia?
¿Por qué cumplo esta condena,
Y mi compañera de celda es la ausencia?
¿Cómo romper las cadenas
Que me atan a este destino?
¿Cómo abandonar el camino
De la aflicción y las penas?
¿Cómo escapar de la duda,
Del odio y de la amargura
Que traen la incertidumbre y el miedo,
Y el desasosiego voraz?
¿Cómo empezar desde cero,
Si es que lo intento y no puedo?
Y me pregunto...
En caso de poder, ¿soy capaz?
En caso de poder, ¿soy capaz?
Sólo me lo pregunto.
- Elohim Flores.
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