La luz y la
distancia
Confabulan en su
corte
De esplendores.
La soledad
Y la lejanía
Observan.
La vastedad del
frío
Y del vacío
Arropa con su
canto
El espíritu
libre
De un cielo
despejado.
Los entresijos
de esta sensación
Que ruega por
ser clamada
Entre los riscos
del eco
De la memoria
Se inundan de
aromas,
Sonidos y
emociones
De mil colores.
Un susurro
atraviesa
La pintura
danzante
Del fantasma del
paisaje.
Lo desconocido,
Lo incógnito y
lo
Ominoso
Constituyen el
pedestal
Del árbol de la
vida.
Y yo, yo sólo
escucho
El líquido
derramado
De las alturas.
- Elohim Flores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario